Con fe y amor patrio, debemos convocarnos de manera exclusiva a proteger a nuestra amada nación, todos los que queremos el bien de la patria, que ciertamente somos más del noventa por ciento de forma positiva. Buen trabajador y fuerte Que siempre busquemos la parte buena y construyamos puentes para progresar y vivir de manera digna pero combativa antes de que la incertidumbre y el desánimo nos abatan, pero a través de nuestra voluntad.O damos paso al fracaso, La improvisación o el deseo de nivelar hacia abajo, que Dios nos ayude a superar esta inconsistencia y juntos recuperemos el prestigio y el dominio que nos fue encomendado y por muchas flautas que haya, nuestro deseo es siempre hacia adelante y en busca del bien. – Siendo para todos sin excepción y con inclusión, a través del trabajo honesto y a través del poder indiscutible de Venezuela demostrado a lo largo de la historia y en cualquier parte del universo que lo sintamos como tal, pelear con improvisación a través de esta incertidumbre momentánea será la nobleza de nuestro ideales
Respiremos audazmente, en su voz triunfadores Y convencidos, como ya se ha probado, de que nuestra raza es la más rica del planeta, disfrutan de toda la riqueza que hay, y por tanto tenemos sobrados motivos para gozar y gozar. Buena educación, buenas universidades, profesores bien pagados. Y los japoneses lo llaman respetable “Si no hay maestro no hay emperador”También un estímulo agrícola, respetando y valorando a quienes producen los alimentos, no debe recibir un trato especial con un regalo que devuelve todo y beneficia a un país que también puede mostrar una ventana al progreso. la cría de animalesE, el sacrificio del ganadero cuyo aporte, aporte y crédito a la nación se siente estimulado y honrado en el tiempo, deseamos la restauración de un parque industrial que encienda chimeneas y narices motores y rescate a los desaparecidos. Y multiplicado por millones, hay que darle vida al sector de la construcción para que vuelva a ser la fuerza que fue; Creemos queridos lectores que estos buenos deseos que van con todas las religiones serán bendecidos por Dios y así será y muchos paisanos que andan errantes por el mundo regresarán.
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Ahora más que nunca el campo es la solución, todos unidos por la paz, la convivencia, el respeto y la prosperidad de nuestro país.
José Gerardo Mendoza Durán
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