– La Prensa – Venezuela –
Fue matriculado en junio de 1966. En el mundo de la música venezolana Un fenómeno inusual como parte de algunos cambios en la cultura del país tras el nacimiento de la democracia liberal.
Un fenómeno artístico no se materializó plenamente en aquel convulso momento sociopolítico, cuando la izquierda declaró la guerra a la naciente democracia liberal en el país.
Entonces un joven músico de 26 años lanzó un disco titulado 33 revoluciones por minuto. Llegó la salsa. Nos referimos a Federico Betancourt, empleado de banca, nacido en Caracas en marzo de 1940, que se dedicó a la música a través de la experiencia.
Todo en él está influenciado por la exuberancia de la música tropical intuitiva y experimental, centrada en Cuba con sus ricos ritmos afrocaribeños y como las orquestas venezolanas. Billos Caracas Boys y Los Melódicos.
Este disco refleja las transiciones que vivía la escena de la música popular venezolana en ese momento. Así como evidencia de que la palabra salsa nació en Venezuela para bautizar al nuevo ritmo que se originó en Nueva York.
Tras la caída de la dictadura perezzimenista en enero de 1958, prevaleció en el país la tradicional orquesta o big band de unos quince integrantes. La mayoría de los grupos nuevos consideran romper ese esquema para reemplazarlo con un combo de menos de diez miembros. Eso es lo que hacen Orlando y su combo y Federico y su combo latino. Recordemos que el combo perfecto o ideal está formado por trombón, trompeta y saxofón.
Lo adoptaron por razones económicas para ahorrar dinero y en respuesta a la exuberancia musical que prevalece en las calles de Caracas donde la gente improvisa en barrios y rincones al estilo neoyorquino.
En las afueras de Caracas surgieron varios grupos, algunos anónimos y otros conocidos como El Sexteto Juventud, Los Dementes y Los Calvos.
Al igual que Nueva York, su escenario son los rincones, calles y barrios donde sus vecinos hacen fiestas de forma improvisada y espontánea.
de modo que, La salsa es un fenómeno artístico, social, humanitario y cultural. Proyección universal con sus características específicas en cada país de la cuenca del Caribe.
De ahí la explicación de la inclusión de instrumentos como el trombón y la trompeta y el saxofón entre otros. Entre ellos, el trombón es el instrumento dominante, contraintuitivo y contraintuitivo en los grupos de salsa.
Sus notas son fuertes y agresivas en sintonía con los movimientos callejeros. Ese estilo de interpretación existe en el grupo de Federico Betancourt. Cada canción está dominada por su sello sonoro único que se reinventa como una síntesis de géneros afrocaribeños.
Por su especificidad, se siente la influencia de orquestas de música tropical de los años 50, entre otras Chucho Sonoza y Megatones de Lucho. Carece de la explosividad de la salsa dura de Nueva York. Las canciones que, a nuestro juicio, más relacionadas con la salsa original de la Gran Manzana son Sancocho Caliente y Guaguanco Mambo. Es ligero por así decirlo porque es suave pero muy potente gracias a la presencia del trombón.
En cuanto al término salsa, fue el primero en utilizarlo en un disco inspirado en el espacio radial de Fidias Danilo Escalona en Radiodifusora Venezuela de Caracas. “Salsa, Sabor y Bembe.” Además, este locutor es el padrino de la creación discográfica para la que su colaboración fue decisiva.
Confirmando que la palabra se originó en Venezuela y luego fue copiada en Nueva York, Johnny Pacheco, quien la atribuyó a
Freddie Torrealba Z
X @freddytorreal11
– La Prensa – Venezuela –
