Representantes de la Organización Mundial de la Salud (OMS) visitaron el lunes el Hospital Al Aqsa en la Franja de Gaza, donde escucharon “relatos desgarradores” de médicos y personas heridas en los ataques israelíes sobre el sufrimiento de la población del enclave. Palestina, informa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Su servicio de salud palestino se cobró la vida de unas 70 personas.
Un niño y una enfermera perdieron a toda su familia en el bombardeo del campo, dijo el jefe de la OMS. “Los trabajadores médicos intentaron desesperadamente salvar a un niño de 9 años llamado Ahmed, que sufrió una grave lesión en la cabeza a causa de la metralla y los escombros de la explosión mientras cruzaba la calle. Los médicos nos dijeron que sus heridas eran tan graves que no sobreviviría”, citó Ghebreyesus la historia de la víctima del ataque israelí.
Asimismo, el director de la agencia de la ONU destacó que los hospitales “están recibiendo muchos más pacientes de los que su capacidad de camas y su personal pueden atender”, por lo que muchas personas “no sobrevivirán a la espera”. Ghebreyesus sostuvo que Al Aqsa cuenta actualmente sólo con cinco quirófanos y dos más que funcionan con la ayuda de Médicos Sin Fronteras (MSF), pero esto es “inadecuado”.
“Debido al creciente nivel de demanda causado por los asesinatos, la OMS continúa apoyando los sistemas de salud en toda Gaza, a pesar de la inseguridad y las importantes limitaciones logísticas”, dijo Ghebreyesus, “expresando preocupación por la presión insoportable que está causando la escalada de hostilidades”. Algunos hospitales en el enclave palestino. Al mismo tiempo, el jefe de la OMS destacó que la mayor parte del sistema de salud de Gaza estaba “arruinado y de rodillas” y pidió un alto el fuego inmediato.
Tomado de La Prensa – Venezuela