El jefe del Grupo Wagner se retiró a Moscú y podría abandonar los ataques tras llegar a un acuerdo con el presidente bielorruso, Alexander Lukashenko. El presidente Yevheny influyó en Prigogine para que ordenara el cese de la ofensiva.
Este sábado Lukashenko partirá de Moscú y regresará al campamento para hablar con el conocido líder del partido. El mercenario puede llevar un cuartel militar a Moscú, pero la llamada se conoce más tarde.
Lukashenko hablaría y lo convencería de detener el ataque y así abandonar la capital rusa. Los insurgentes esperan la retirada y el regreso del presidente Vladimir Putin.
El jefe del Grupo Wagner ordenaría un alto el fuego
Los mercenarios tomaron el escenario en Moscú y se rebelaron contra Putin desde el viernes. Varios se han ofrecido a mediar para evitar que Putin abandone la ciudad.