París.- Al menos 31 personas fueron detenidas como consecuencia de violentos enfrentamientos entre policías y vecinos de la ciudad francesa de Nanterre, ubicada en el departamento de Hautes-de-Seine. La tensión escaló tras el asesinato de Kishore por parte de los agentes esa misma mañana.
Según medios locales, durante los disturbios, que inicialmente se desataron a unos cientos de metros de las casas de las víctimas, se destrozaron paradas de autobús, se dejaron botes de basura en las calles y se incendiaron varios autos, además de un gran registro. Los incendios se concentraron en mobiliario urbano, contenedores y equipos presentes en las zonas de construcción. Además, decenas de personas levantaron barricadas para evitar que las fuerzas del orden ingresen al área.
Por su parte, las autoridades desplegaron en la ciudad varias unidades de fuerzas móviles, incluida la policía antidisturbios (CRS, por sus siglas en francés).
Según los informes, los agentes utilizaron gases lacrimógenos para hacer retroceder a la multitud, mientras que un hombre informó haber sido herido en el ojo por una “bola de destello” (LBD), un arma que dispara balas de goma y que suele utilizar la policía. contra los manifestantes. Por otro lado, al menos 24 policías resultaron heridos y 40 vehículos fueron incendiados tras los disturbios.
matar a un adolescente
Los hechos se produjeron horas después de la muerte de un adolescente de 17 años a manos de un policía que se negó a usar su arma.
Momentos después del incidente, un video mostró en las redes sociales que el automóvil detuvo a dos policías que estaban parados junto a la ventana, luego uno de ellos apuntó con su arma a la víctima. El oficial disparó a quemarropa mientras el vehículo volvía a arrancar. La bala alcanzó al adolescente en el pecho y no lograron reanimarlo.
Por su parte, el prefecto de la policía de París, Laurent Núñez, dijo a BFMTV que, según la versión policial, dos agentes se le acercaron para controlar el “vehículo que cometió varios delitos”, pero no se detuvo.
“Este vehículo inicialmente se negó a ceder el paso, luego quedó atascado en el flujo de tráfico, donde dos policías intentaron controlarlo. En ese momento, el conductor, que primero había apagado el motor, volvió a arrancar el coche y aceleró. En ese contexto, el agente utilizó su arma de fuego”, explicó y agregó que “hay una investigación que determinará las circunstancias en las que ocurrieron estos hechos”.
Tomado de La Prensa – Venezuela