– La Prensa – Venezuela –
La profunda crisis que atraviesa nuestro país, es preocupante para quienes compartimos una ideología. cambio democrático Caigamos en la trampa del conflicto interno. Más allá de las diferencias de opinión sobre cómo lidiar con la administración de Maduro, la represión y los ataques entre actores democráticos sólo socavan la posibilidad de construir una alternativa sólida al sistema que ha sumido al país en el caos.
D La esencia de la democracia Está en la pluralidad, en la posibilidad de pensar diferente y en el respeto mutuo entre quienes buscamos el mismo objetivo desde diferentes perspectivas. Sin embargo, en nuestro país las divisiones internas han servido como un arma eficaz para el grupo de Maduro. Aunque permanecen unidos, al menos formalmente, consolidando su control sobre las instituciones y los recursos, la esfera democrática se pierde en disputas públicas que sólo refuerzan el status quo. De hecho, en muchos casos apuestan por nuestra desunión como herramienta para permanecer en el poder, porque conocen el verdadero potencial de una oposición unida. estrategia democrática.
– La Prensa – Venezuela –
El mayor error de este año ha sido convertir nuestras diferencias en el centro del debate, olvidando que el verdadero adversario está afuera, no adentro. Somos muchos los que deseamos superar esta fase oscura y aunque no siempre estemos de acuerdo con la estrategia, esto no debería ser motivo para atacarnos. Cada cierto tiempo caemos en la tentación de descalificar a quienes piensan diferente sector democráticoGanamos el régimen alejándonos del objetivo común.
Pero unidad no significa uniformidad. No se trata de que todos estemos de acuerdo con todo sino de reconocer su valor Diferentes perspectivas Para enriquecer la lucha. Lo fundamental es centrarnos en lo que nos une: el respeto, la inclusión y la necesidad de reconstruir Venezuela desde la democracia.
D caza de brujas Antidemocrático y destructivo entre los aliados. Esta división no sólo nos impide lograr un cambio político, sino que también pone en peligro las esperanzas de millones de venezolanos que anhelan un futuro diferente.
Es necesario reflexionar y trabajar con ello. Madurez política. Debemos priorizar el diálogo, generar consenso y trabajar juntos por encima de las diferencias. Sólo a través de la unidad de todas las voces democráticas –ciudadanos, líderes políticos, sindicatos y organizaciones sociales– podremos construir una propuesta fuerte y legítima para superar esta crisis.
El clan de Maduro sabe que su mejor arma es dividirnos, sembrar desconfianza e incitar discordia. No podemos permitir que sigan logrando sus objetivos. Dejar de lado los desacuerdos internos y centrarse en los adversarios reales es una cuestión estratégica y una Compromiso moral con el país. Que queremos reconstruir. Unidos, desde nuestras diferencias, tenemos la oportunidad de restaurar la democracia y darle a Venezuela un futuro de justicia, libertad y progreso. Esta es responsabilidad de todos.
Stalin González
– La Prensa – Venezuela –