José Carlos de Nóbrega fue ante todo un revolucionario y un hombre digno, irreverente y puro de fe cristiana. Su honestidad lo santificó y lo condenó a la pobreza. Luego viene el intelectual premiado Pragadhar. y al mismo tiempo capaz de conversar con el más humilde bardo con agudeza y entusiasmo.
“Enrique Tejera” también es un profesor de literatura muy hábil en el instituto, dialoga y se encarga de enseñar a pensar, no a hablar. Soportó los sufrimientos del justo maestro sin calmarse jamás ante el odio de los discípulos.
Nosotros en la Defensoría del Pueblo de la Educación estamos sorprendidos y consternados de que no se pueda discutir más sobre este asunto. Poetas provenciales José Saramago, Fernando Pessoa, CamosLos grandes de la lengua portuguesa que tanto cultivó.
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Pensar que una de sus últimas alegrías la dedicó al mártir Salvador Montes de Oca. ¡Cuánto dolor y cuánto dolor deben sentir los poetas de la alegría bohemia! Nos quedamos, y no es poco, su libro. “Cuando muere un cantante, mi tierra une la poesía al dolor.”
Douglas Morales Pulido / La Prensa – Venezuela