– La Prensa – Venezuela –
La pregunta anterior se la debo a la sociedad Lawrence como ciudadano público que fui, desde que era adolescente y acción democrática, a los ojos de sus mejores hombres y mujeres y la mejor vigilancia lara, en defensa de los principios políticos y morales en los que creían. Conocí y viví tres grandes crisis del partido, y una frase del infatigable Antonio Leydenz resuena en mis sentimientos de acción democrática “La AD es un recurso natural renovable” que se ha desperdiciado, añadiríamos, por los desvíos que se han producido. ocurrió. Por miedo a la corrupción entre otros y luego, una personalidad vulgar que lo dice todo. Condenar todo esto, fue algo incómodo y cuando se acordó con Chávez Frías En el año 2000 renuncié con tristeza y con la conciencia tranquila, para incorporarme a la Corte Suprema de Justicia, a cambio de no investigar la corrupción en algunas gobernaciones estatales. Con el paso de esos años escribí “La Robovolución Chavista”, que nadie compró por 20 bolívares, y lo que decía, en el mejor momento de Chávez, no fue invención de la tragedia que viviremos, culpando a un mediador de la oposición por Se dedicaba a enriquecerse con el régimen y no nos equivocamos. Durante este tiempo actuó solo, hasta que otra crisis de acción democrática, como el suicidio, volvió tontamente a un grupo que se había aliado con el régimen, contra otro, que fue identificado como “Resistencia“En tan comprensible situación, manifesté públicamente que acepto el 61 constitucional que da derecho a ejercer el “voto de conciencia” que haremos a favor del ciudadano Edmundo González Urrutia, postulado a la presidencia de la República, en una interpretación nunca antes vista en la vida de nuestra república.
¡Este solo hecho basta para pensar que en un país como Venezuela el presidente por fin! tendremos la oportunidad proceso de conversión Hacia rescatar y redefinir el Estado de derecho, específicamente el alcance de esa presidencia y las instituciones que sustentan el sistema democrático para una gobernanza eficiente, la ardua tarea de superar la crisis masiva y los principios constitucionales que la acompañan. Un “estado social de derecho y justicia”.
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Edmundo González Urrutia, la república resultó ungida por el destino histórico. Esto último puede ser refutado, pero ¿el sacrificio de Miranda nos dio a Bolívar Libertador, a Paiz, al propio Juan Vicente Gómez, un destino sin esperanza con la democracia? Chávez expuso sus imperfecciones que muchos se negaron a afrontar y ahora, ¿por qué no corregir González Urrutia, los fracasos acumulados?
El destino (también llamado fatum, fatalidad o destino) se refiere a una persona que está destinada por acontecimientos o acciones. Una especie de “fuerza o plan sobrenatural que dirige la vida humana y de cualquier ser hacia un fin no elegido”. Algunas religiones lo reconocen como una “predestinación” del destino. Los griegos (Ananke) lo consideraban un poder superior” (Wikipedia) y un diccionario filosófico hace referencia a nuestra teoría de la causalidad que afirma que, “si toda acción tiene una reacción, hay dos “Acciones iguales tendrán reacciones iguales”. Según el análisis del puesto”Historia y destino» Jean Guitton de José Luis Manes, al abordar el dilema del destino de la existencia humana en el tiempo y la historia, se plantea la posibilidad de su futuro temporal o la incertidumbre total de tal manera que su existencia depende enteramente de las circunstancias divinas y sus independencia; del destino, que a priori conecta los acontecimientos humanos y naturales de la historia de manera necesaria e innecesaria, que el hombre no puede evitar, y finalmente, la cuestión del destino, en la que la libertad humana actúa en condiciones o circunstancias objetivas, con la intervención del factor atemporal y eterno de Dios, que es para nuestro bien, nos ordena conformarnos a las circunstancias con nuestras propias acciones, es decir, que, sin quitarnos la libertad, nos dirige con su providencia»…
Y dejémoslo aquí para conversar un poco…
Jorge Ramos Guerra
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